El proyecto nació de un deseo muy claro: crear un espacio que pudiera reunir a toda una familia en un entorno de tranquilidad, belleza natural y sofisticación arquitectónica.
Ubicada en la Recta de Los Álamos en Chinácota, La Reserva de Los Álamos fue concebida como un lugar donde el diseño contemporáneo se funde con la calidez de los materiales nobles con detalles pensados para acoger e integrar. Maderas cálidas, transparencias, muros texturizados y jardines integrados hacen que cada espacio se sienta vivido, amable y profundamente humano.
El diseño se fue construyendo a través de una serie de conversaciones con cada integrante de la familia donde expresaron cuidadosamente sus necesidades, gustos y expectativas. Al finalizar esta etapa, decidimos desarrollar tres niveles: un nivel como zona de descanso y dos de ellos con áreas que combinan la convivencia con espacios abiertos para el placer y el disfrute familiar. Quisimos aprovechar su ubicación con grandes ventanales para que la luz natural recorra el interior a lo largo del día, mientras se enmarcan vistas del paisaje montañoso y los álamos que dan nombre al lugar.
La Reserva de Los Álamos es más que una casa de descanso: es un proyecto construido con el propósito de reunir. Un santuario donde la familia se encuentra con la naturaleza, la casa respira, se conecta con la tierra y acoge a quienes llegan buscando una pausa, un reencuentro, un hogar.